Por: The Chess Mom
La fría mañana del domingo 20 de febrero nos desplazamos hasta la capital de la Costa del Sol para afrontar con valentía el que sin duda iba a ser uno de los encuentros más duros de la Liga, tanto por la veteranía y media de ELO de los contrincantes, como por faltarnos uno de los pilares fundamentales del equipo, nuestra princesa guerrera.
El CLUB TREBEJOS, presidido por José Morata,comparte sede con la Delegación Malagueña de Ajedrez en el número 13 de la calle Malpica, en el barrio malagueño del Perchel. Las calles adoquinadas y las casas tradicionales que rodean al club son muestra de la historia de este barrio pesquero, uno de los más antiguos de Málaga, que toma su nombre de las perchas con las que ya desde la época romana sus pescadores secaban el pescado al sol.
El Club Trebejos forma parte de la propia historia del barrio perchelero y de la capital malagueña. Fundado formalmente en el año 1986, cuenta en la actualidad con más de 20 jugadores federados de gran veteranía que presumen de haber disputado de forma ininterrumpida más de 450 torneos en los últimos 25 años.
A las 10:00h, y con un punto en contra del equipo METRO “E”, dieron comienzo las partidas. En esta ocasión, el canterano del CLUB METRO Alberto Reque, sufrió gravemente las consecuencias de su nerviosismo inicial. Su juego precipitado le llevó a cometer un importante fallo de cálculo en la apertura que Gabriel Candamil Neira (EloA1586) no dudó en aprovechar para marcar el segundo punto a favor de su equipo.Más sosegado y seguro, Eric Loriente, en la mesa 3, logró derribar con gran éxito la defensa escandinava planteada por José Morata Pérez (EloA1252), ganando su primer punto de la temporada e inclinando así de nuevo la balanza hacia el 2-1.
Solo quedaba una partida y mucho en juego, pues nos jugábamos el empate. En la mesa número 2, Marcos Reque, con las piezas negras, batallaba con todo su empeño contra Francisco Colomer de Luque (EloA1415). Tras reponerse de un fallo en la apertura, Marcos consiguió llegar al medio juego con una posición muy igualada y con apuros de reloj para el contrincante. Finalmente, y tras más de 3h de dura lucha, el jugador local derrotó a nuestro canterano, rematando así el punto de la victoria a favor de su equipo.
Resultado final: 3-1, un resultado agridulce con una gran victoria para celebrar y dos derrotas de las que aprender y salir reforzados.
Lección sobre perseverancia: Mantener la motivación, el interés y el esfuerzo a largo plazo a pesar de las adversidades.